El marketing online maneja términos que, para el común de la gente, resultan desconcertantes. Sin embargo, a veces el funcionamiento de las herramientas es más simple de lo que parece. Seguramente escuchaste hablar de las campañas de Costo por Clic (CPC): hoy te vamos a contar de qué se trata.
El Costo por Clic es un indicador de rentabilidad que se basa en el pago de un importe por cada clic obtenido en anuncios. Si lo comparamos con las herramientas de marketing tradicionales, sería lo que estamos dispuestos a pagar por cada persona que entra en nuestro negocio.
Cuando un usuario hace un clic en un anuncio de nuestra marca, significa que está mostrando un interés por ella, por lo que el porcentaje de conversión en cliente suele ser mucho mayor si lo comparamos con el modelo de coste por impresión, que solo asegura impresiones del anuncio.
Sin embargo, para que este modelo sea rentable, es fundamental que conozcamos las estadísticas de tráfico e identifiquemos qué porcentaje de las visitas se convierte finalmente en cliente. La mayoría de plataformas publicitarias –como Google AdWords, Facebook Ads, Twitter Ads, Bing Ads– basan sus campañas en modelos de coste CPC, aunque existen otras alternativas dependiendo del formato del anuncio o de los diferentes tipos de campañas.
Sabio es una filosofía. Es una forma de pensar y de hacer. Es simple: se trata de tomar decisiones coherentes y consistentes con respecto al tamaño y a las posibilidades de nuestra empresa. Objetivos reales y resultados alcanzables, a nuestra medida. Este proceso no es mágico, es el resultado de un análisis y de un trabajo enfocado, con base en el estudio y el conocimiento de casos. No existe un Sabio: existe una forma de tomar decisiones sabias en pos del éxito de nuestro empredimiento.